Desde el PSOE denunciábamos hace unas semanas la ilegalidad cometida por el Gobierno del Partido Popular, que venía contratando, desde septiembre del año pasado, la gestión e implantación de proyectos turísticos con un falso autónomo, fraccionando los contratos con el único objetivo de burlar la Ley de contratos.
El diputado Socialista, Miguel González de Legarra, denunció el pasado mes de junio que La Rioja 360 había contratado a una antigua empleada de la actual directora general de Turismo, Virginia Borges, que trabajaba en su empresa privada hasta su nombramiento como alto cargo del Gobierno del Partido Popular y ahora señala que “acaba de hacerse público el listado de facturas abonadas a la antigua empleada de la directora general que permiten comprobar que, tal como denunció el PSOE el pasado mes de junio, la cantidad que su ex jefa le ha abonado en los últimos once meses supera los 33.000 euros”. Así, en el año 2023 se le abonaron 15.276,25 euros y hasta junio de este año la cifra que ha percibido es de 17.787 euros.”
González de Legarra llama la atención sobre el hecho de que “el contrato con esta falsa autónoma se rescindió, de manera fulminante, inmediatamente después de la denuncia pública que hicimos desde el PSOE, lo que evidencia la irregularidad del contrato y que la intención inicial del Gobierno del PP era consolidar a esta persona como trabajadora de La Rioja Turismo, así como las mentiras que desgranó el consejero de Cultura y Turismo, José Luis Pérez Pastor, en la defensa infumable que de esta contratación hizo en el Parlamento.”
Es evidente que estamos ante un “escandaloso fraccionamiento de contrato, a lo que hay que sumar un claro caso de falso autónomo porque es un único servicio, y porque, a pesar de su importe, salta de un año a otro y no se ha producido licitación alguna como establece la Ley”. Además, debemos recordar que el acumulado supera con creces los 15.000 euros más IVA que es lo máximo que autoriza la Normativa. Es decir, no estamos ante un contrato menor que pueda adjudicarse de forma directa.
González de Legarra considera que “el año transcurrido desde que Virginia Borges asumió la dirección general de turismo se ha caracterizado por una ausencia absoluta de gestión”. Y es que “no se han realizado campañas de promoción en ninguno de los nichos turísticos y nos consta el profundo malestar de diferentes actores del sector que están denunciando la parálisis de la dirección general y el desánimo y la falta de motivación que impera entre los propios trabajadores de La Rioja 360”.
El diputado Socialista ha afirmado que “el comportamiento totalitario que la directora general exhibe en su relación con los trabajadores ha generado tal tensión que, además de provocar la paralización de la actividad habitual de promoción turística en La Rioja, ha derivado en un clima de malestar que ha obligado a un tercio de la plantilla a pedir la baja médica por depresión y ansiedad”.
Estamos ante una situación que es “lo suficientemente grave como para que el consejero de Turismo, e incluso en propio presidente del Gobierno, tomen cartas en el asunto para poner orden y restablecer la normalidad en una dirección general cuyo trabajo es fundamental para el desarrollo económico de La Rioja”.